Las vitaminas inyectables están diseñadas para aportar hidratación profunda y luminosidad a la piel, además de ayudarnos a frenar los signos del envejecimiento. Obtenemos resultados visibles en pocos días, con una mejora evidente de la calidad de la piel.  Además son muy buen complemento de las limpiezas faciales y cualquier otro tratamiento, como rellenos o botox, que vayamos a realizar después.

Son uno de los efectos flash  de la medicina estética no invasiva que generan resultados más rápidos y eficaces. Al poco tiempo de ser inyectadas, las vitaminas hacen que la piel se vea reluciente.  Las inyecciones faciales pueden suavizar y mejorar la apariencia de la piel.

Además, es poco probable que el tratamiento con vitaminas genere efectos secundarios adversos. La mayoría de estos efectos adversos no son graves, como enrojecimiento o hinchazón ocasionales en el lugar de la inyección.